De la teoría a la práctica

Un año más. Un año menos. ¿Por qué felicitarlo? Como siempre, el 31 de diciembre se convierte en el día mundial del "¡¡Feliz (inserte aquí su fecha)!!". Ojo, que tampoco está mal, hay que celebrar que empieza un nuevo año, que tenemos otros 12 meses para vivir. Pero, ¿por qué solo un día? Propósitos, promesas, cumplimientos, llámese como quiera. A 20 de enero (por decir una fecha) ya se nos olvidan a todos esas metas que nos hemos propuesto. Si que hemos durado, si...

La vida me ha enseñado, y cuando digo vida no solo digo mi propia experiencia, sino las ayudas, enseñanzas y compañía de tantas personas que han pasado del simple "Ola ke ase" a ser indispensables y formar parte de mi existencia; la vida me ha enseñado que ponerse metas que luego no vas a cumplir no sirve. Bueno sí, pero a mal.

"Este año dejo de fumar"

"Este año aprendo a hablar inglés"

"Este año hago dieta y voy al gimnasio"

Por mí estupendo que pienses así, yo también lo hago y es normal. Pero mejor que eso prefiero pensar... digamos... un poco menos:

"Mañana me fumo dos cigarros en vez de cinco"

"Voy a aprenderme los colores a lo largo de esta semana"

"Por hoy 2 km creo que son suficientes. Si sigo así en un mes podré hacer 2'5 km"

Si amigos, pequeños pasos. Esa es la clave. Y ya está. Piénsalo, no tienes un año para cumplirlo. Tienes 365 oportunidades, 365 nuevos días para luchar y seguir adelante. ¿Fácil? Quizá no, pero valdrá la pena, eso seguro.

Lo pasado ha huido

Lo que esperas está ausente

Pero el presente es tuyo

Así quiero acabar este 2012 y empezar el 2013, sabiendo que el hoy depende de mí, teniendo en cuenta las experiencias ya vividas para llegar a un futuro en el que sea feliz. Eso pido también para vosotros: que luchéis por vuestros sueños que seguro se cumplirán. Sed felices :)